Vivir

He estado viviendo a mil revoluciones por minuto.

El colegio me tiene de cabeza, ya no se qué mas hacer para no rendir en diciembre. Por otro lado ingresé en una especie de, no sé cómo llamarle, curso, capacitación, algo. Cuestión que es un simulacro de la Organización de las Naciones Unidas, donde a cada delegación (3 personas) se le asigna un país y tienes que saber absolutamente todo sobre tu país, y defenderlo como si fueras un habitante de esa nación. Yo soy la embajadora de mi delegación, lo cual me lleva a tener que estudiar más que mis otras dos compañeras de delegación -.- Pero no importa, yo me he metido en este lío, y creo poder superar el reto. Faltan sólo 3 semanas para el simulacro, y me permito decir que estamos bastante atrazadas con el estudio. Corrección: Estoy bastante atrazada con el estudio y este fin de semana largo no creo poder estudiar mucho, ya que my boyfriend está en la ciudad, así que disfrutaré cada segundo con él ♥. Sigo totalmente enamorada, se nota a millas. Por eso les dejo algo referido a la ocasión, kisses.

Me desespera, te juro que no aguanto el pasar de las imágenes por mi cabeza, los momentos vividos junto a ti y que sean solo recuerdos. Cuento las horas hasta el próximo weekend y pasa tan rápido como un cometa. Mi felicidad es transitoria. Es el trayecto que haces cada dos semanas para volver a tu lugar, donde sabes que siempre habrá una mujer esperándote con los brazos abiertos, dispuesta a complacer todos tus caprichos, y a perdonarte hasta la más ingrata de las faltas. No, no estoy hablando de tu madre, estoy hablando de MI. Yo, mi persona que se bipolariza cada dos minutos con tal de gustarte un poquito más; aunque ya sé que te gusto más de la cuenta. No es por presumir pero me lo repites muy seguido. Me gustas de todas las formas, hasta cuando te conviertes en un maniático, en un amoroso sin censura, en lo mejor que me pasó en la vida… Seguiría agregando elogios inimaginables, pero no dispongo de mucho tiempo. ¿Qué más decir? Ah, gracias por alegrarme cada día, por convertir el negro en rosa, por darme mil motivos para seguir.

MartiGiacoboni.